martes, 16 de febrero de 2010

conquistando tu lado de la cama


Esta noche no me preguntes por qué me imaginé durmiendo contigo, más bien sin dejarte dormir. Me acurruqué en tu memoria intentando chuparle el calor, como cada vez que en mi vida he abrazado a mi padre, para que los días de frío sean menos amargos. He nacido en una ciudad con clima templado para entre otras razones que los abrazos a mi padre no sean interesados. Volvía a la noche que hoy comienza. Empecé saboreando tus labios, que tantas veces recorrí. Tu sangre latía en orden, aún mi cuerpo no está lo suficientemente cerca del tuyo. Utilizaré varios tiempos verbales para que notes el juego que hace mi lengua cuando empieza por tu barbilla sin ánimos de parar. Por suerte la tarde la despedimos con el dedo acusador y no con la palma de la mano tambaleandose tras una noche cualquiera de sexo, drogas y alcohol, ¿por qué no decirlo?, de calentón. Debatimos con un cigarrillo y como tanto te gusta, con una copa de vino todos aquellos aspectos que eras incapaz de mirarme. No traté de molestarte pero empezaste a tensarte. Empecé a notar como tu corazón palpitaba a ritmo pausado, sin turbulencias, pero simplemente en ese detalle no me había fijado hasta ese momento, aprenderme todos tus puntos A,B,C y D fue más que difícil.
Aunque toda tu sangre ahora se centraba en una sola parte de tu cuerpo, en la misma que yo.
[.,.]




siempre quise entrar desnudo en tu habitación, y
pasar la fría noche bajo tu edredón. no hay nada que me llame más, siempre quise
incursiones en tu habitación. siempre quise estar pegado a tu radiador. no hay
nada que me encienda más. siempre quise estar tumbado y desnudo en tu
habitación. no hay nada que no acabe mal. no hay nada que no sepa hacer
mejor

sábado, 13 de febrero de 2010

crónica de una muerte anunciada


con el perdón de Gabriel García Márquez

noventaitrés

Te quiero porque creo que entiendes como soy. Te quiero porque a ti te puedo contar lo que a nadie le puedo contar. Porque puedo sentir que mi vida a tu lado cobrará sentido y dejará de ser vacía. Te quiero porque me preguntaste cuántos años tenía cuando murió mi padre y eso nadie me lo había preguntado jamás. Te quiero tanto que me gustaría…



-¿Qué te gustaría?



No sé no lo he podido escribir se me agotaron las palabras, sesentaicinco son muy pocas ¿no?





Ya que no viste el video aquí lo tienes, para leer. Aunque tu número sea el veintitrés.

Es el día de mi cumpleaños, también era el número de Beckham cuando estaba en el Madrid, que es mi equipo favorito y era mi jugador favorito.

Un número al azar

Instrumentos de viento, de cuerda, de ira. Mientras sonaban, anuncio de bocas hambrientas, de hambre de todo aquello que jamás tubo sentido, ni lo tendrá.


Han vaciado el tiempo, ahora dejan el camino abierto, el cielo cubierto, tu mente repleta de ideas de principio. El final lo pusieron los medios.
Él cómo llegar.
Despertaste, comenzaron aquellos días de lucha, de furia, de viento y de cuerda, de tantas cosas que olvidaste poseer. Aniquilaste tus miedos y fijaste tu objetivo.
Y así serán todos los tiempos sin necesidad de oráculos o premoniciones de dinero fácil. De chistes y adivinanzas con un error de base.
Una guerra forzada.
La victoria se irá con la primera bala, el primer golpe.
LLantos, gritos, dolor, pena. Desolación en millones de ellos. Innecesarios presajios que nos dejaran con un solo fin.

Mi reina, mi esposa, mi amor.
300

viernes, 5 de febrero de 2010

amanecí soñando que sería aterrador

Esto ha sido una comedia, una tragico-comedia. Un guión entre bambas escrito, un desliz de mañanas desacafeinadas. Un disgusto incontrolado. Ahora quiero parecer contenta quiero de verdad, deciros cuanta falta me habéis hecho, de verdad suplicaros ser valiente. La proxima vez darme cuenta de que estoy unida a vosotras no por casualidad. Que solo a veces me rio, lloro y me esfumo y vosotras estais ahí por azar.
Anoche viaje muy lejos, me debatí entre el cielo y el infierno entre lo que mereció y no, la pena, socorrí a gente indefensa, me socorrí a mi misma. Y hoy es más.
Hoy por casualidad lloré y estabais vosotras. Grité y me escuchaban. Soñe que no se fueron y se hizo realidad. Supongo que si sois parte de mi si yo me pierdo os perdeis conmigo.
Hacer la maleta porque esto promete. No pienso volver hasta sentirme
como en casa.

jueves, 4 de febrero de 2010

Por nada.



Love of my life, my soulmate.
You're my best friend, part of me like breathing.
Now half of me is
left.
I don't know anything at all. Who am I to say
you love me & who am I to say you need me?

Color me blue I'm lost in you, don't know why I'm still waiting.
Many moons have come & gone,
don't know why I'm still searching.
Never thought it feels so free, now I
know what's meant to be & that's okay with me.


miércoles, 3 de febrero de 2010

Sweet and dainty


La cafetera está vacía y yo sin ganas de hacer café.

Literatura inerte de siestas sin dormir. He intentado darle vida a un carusel, de tirarme de cabeza a esa habitación de hotel. Aunque está vacía como tantas otras estancias en mi casa, y eso lo sé. Pero juego con ventaja, nadie me vio marchar. Al menos podré jugar con ellos al escondite. Suena aterrador. Desaparecida. Desconocida. Fuera de sí. No cabe en mil palabras ni van a co(a)ntar los versos de una nueva canción. Difuminados campos de colores. Centros de flores torcidas. Arcos de sol y oscuridad, amaneceres repletos de tristeza.

Cierra la puerta. Quiero estar sola.


Quizás, siempre con porcentajes de posibilidad, se excusen en fiestas paganas, en tardes de miércoles o en noches mojadas. Se escondan como me escondí yo, en párrafos negros en neveras vacías con leche de vaca y ganas de nada.


Robe dos pistolas, ninguna bala y tres objetivos.


Robar, disparar y devolverla al comprobar que intenciones sin ánimo de lucro se extasiaron como las últimas noches de verano a vuestro lado.